Catholic community in Shinjo

Haruka Igarashi, daughter of a Japanese father and a Filipino mother, talks about his Catholic community in Shinjo, in the prelature of Yamagata (Japan). With the help of many, and with the animation of Fr. Kenji HONMA sscc, they have built a beautiful church and they are building a no less beautiful Christian community, with a majority of Filipino origin but open to all.

Haruka Igarashi, hija de padre japonés y madre filipina, nos habla de su comunidad católica en Shinjo, en la prelatura de Yamagata (Japón). Con la ayuda de muchos, y con la animación del P. Kenji HONMA sscc, han construido una hermosa iglesia y están construyendo una no menos hermosa comunidad cristiana, con una mayoría de origen filipino pero abierta a todos.  

Shinjo Catholic Church is surrounded by Japan’s beautiful four seasons and nature. For 20 years, we did not have a church of our own to pray in, and had to borrow other places. In other words, the place we gathered to pray became “our church”. But at last, our wishes came true and our very own Shinjo Catholic Church was built.

Fr. Kenji Honma sscc

The “bond” built between church members, as we continued to pray together to overcome the difficult times, has given me great joy. And now, since more people are coming to church, the power of prayer has grown. It has also become a place where everyone can feel at home speaking the Philippine language, eat delicious food, listen to music, and is filled with laughter. This makes me very happy. We will never forget to be grateful for what is given to us, and keep praying with love.

Haruka Igarashi.

 Link to the community web site:  http://www.catholic-yamagata.com/shinjo-church/

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La iglesia Católica de Shinjo (Yamagata, Japón)  se enmarca en las cuatro estaciones de la naturaleza en Japón. Desde hace 20 años, no teníamos una iglesia propia para poder orar y teníamos que pedir prestados otros lugares. En otras palabras, el lugar donde nos reunimos para orar se convertía en "nuestra iglesia". Pero finalmente, nuestros deseos se hicieron realidad y nuestra propia Iglesia Católica de Shinjo ha sido construida.

El "vínculo" construido entre los miembros de la iglesia, ya que continuamos rezando juntos para superar los momentos difíciles, me ha dado una gran alegría. Y ahora, ya que más personas están llegando a la iglesia, el poder de la oración ha crecido. También se ha convertido en un lugar donde todos puedan sentirse como en casa, hablando el idioma filipino, comiendo deliciosa comida, escuchando música, y llenando todo de risas. Todo esto me hace muy feliz. Nunca nos olvidaremos de ser agradecidos por lo que se nos ha dado y nos mantendremos orando con amor.

Haruka Igarashi. 

Enlace a la web de la comunidad: http://www.catholic-yamagata.com/shinjo-church/

La Resiliencia

Español / English

Es la capacidad del ser humano para enfrentar y superar situaciones adversas, mirar los obstáculos y las dificultades como oportunidades, reaccionar positivamente frente a las circunstancias desestabilizadoras, aprender de ellas, superarlas y ser transformado positivamente. 

Es la capacidad para permanecer de pie cuando las tormentas nos amenazan y golpean; permanecer de pie no significa ser rígidos, inflexibles, incapaces de sentir malestar, dolor emocional… Se necesita ser flexible y tener visión, para reconocer cuando ha llegado el momento de soltar las amarras y lanzarse hacia un rumbo nuevo. Las crisis son necesarias para el crecimiento humano y espiritual, son oportunidades para crecer y nos permiten descubrir y desarrollar nuestras capacidades, muchas de ellas desconocidas, ignoradas o escondidas.

“Supone un enfoque esperanzador de la vida, sin dejar de lado el realismo; una persona así, es consciente de la realidad pero no permanece atrapada por ella, más proyecta el futuro, se fija objetivos viables y los consigue.  Cree que el amor tiene más palabra que el mal o que la muerte y convierte la dificultad en reto, liberándose de las cadenas opresoras de las circunstancias o del llamado destino”.(Rosa Ma. B.)

La dinámica de la resiliencia está muy presente en la Biblia. Es, en el fondo, eminentemente bíblica, experimentada como el paso de un mal o de un bien menor a un bien mayor, de la noche a la mañana, de las tinieblas a la luz… Está presente tanto en el Antiguo como en el Nuevo Testamento, por ejemplo: en la historia del pueblo judío, en la travesía del mar rojo y el desierto; en la ocupación y el exilio...; en los milagros de Jesús, difíciles a veces de interpretar y en muchas otras historias individuales.  Todos estos momentos y circunstancias tienen esa dinámica hacia “un plus de vida”.

Pilares de la resiliencia

Ignacio Martín Morales, señala y describe los siguientes:

1. Autoestima positiva.  Es la base de los pilares, es la capacidad de quererse a uno mismo y de querer a los demás, de saberse muy valioso y además afirmarlo.
2. Introspección.  Es el arte y la capacidad de preguntarse a sí mismo sobre los propios actos, estados de ánimo o de conciencia y darse una respuesta honesta.
3. Independencia.  Saber fijar límites entre uno mismo y el entorno adverso. Aprender a mantener distancia emocional y física, sin caer en el aislamiento.
4. Relación.  Capacidad de relacionarse, de establecer lazos e intimidad con otros y equilibrar la propia necesidad de afecto, con la actitud de entregarse a los demás.
5. Iniciativa.  Capacidad y gusto de exigirse y ponerse a prueba en tareas cada vez más exigentes, responsabilizándose y ejerciendo el control sobre las situaciones difíciles y conflictivas.
6. Sentido del humor.  Capacidad de encontrar lo cómico en la propia adversidad, esto permite ahorrarse sentimientos negativos, alejándose del foco de tensión, relativizando y positivando los problemas.
7. Creatividad.  Capacidad de crear orden, belleza y propósito a partir del caos y el desorden. Fruto de la reflexión.
8. Pensamiento Crítico. Capacidad de analizar críticamente las causas y responsabilidades de la adversidad que se sufre y tomar las decisiones adecuadas para enfrentarlas o cambiarlas, responsabilizándose del resultado de las propias acciones.

Características de las personas resilientes (Ana Muñoz)

Las personas resilientes poseen tres características principales: saben aceptar la realidad tal y como es; tienen una profunda convicción en que la vida tiene sentido; y tienen una inquebrantable capacidad para mejorar.

Además, presentan algunas habilidades:

• Son capaces de identificar de manera precisa las causas de los problemas, para impedir que vuelvan a repetirse en el futuro. Saben recontextualizar los acontecimientos y mantener una visión esperanzada.
• Saben controlar sus emociones frente a la adversidad y pueden permanecer centradas y unificadas, aún en situaciones de crisis.
• Saben controlar sus impulsos y su conducta en situaciones de alta presión. Evitan ver las crisis como problemas insuperables.
• Tienen un optimismo realista, es decir, piensan que las cosas pueden ir mejor, tienen una visión positiva del futuro y piensan que pueden controlar el curso de sus vidas, pero sin dejarse llevar por la irrealidad o la fantasía.
• Se consideran competentes y confían en sus propias capacidades. Alimentan una visión positiva de sí mismas.
• Son empáticas, es decir, tienen una buena capacidad para leer las emociones de los demás y conectar con ellas.
• Son capaces de buscar nuevas oportunidades, retos y relaciones, para descubrirse a sí mismas.

Cómo ser personas generadoras de resiliencia?

La Asociación Americana de Psicología plantea 10 formas de construir la Resiliencia:

1. Establecer relaciones. Es importante establecer buenas relaciones con personas significativas en la vida. Aceptar ayuda y apoyo de personas que nos quieren y escuchan.
2. Evitar ver las crisis como obstáculos insuperables. No se puede evitar que ocurran situaciones que producen mucha tensión, pero sí se puede cambiar la manera de interpretarlas y reaccionar ante ellas. Hay que mirar más allá y tener una visión positiva.
3. Aceptar que el cambio es parte de la vida. Es posible que como resultado de una situación adversa, no sea posible alcanzar ciertas metas. Aceptar las circunstancias que no se pueden cambiar puede ayudar a enfocarse en las circunstancias que sí se pueden alterar.
4. Moverse hacia las metas. Desarrollar algunas metas realistas en vez de enfocarse en tareas que parecen que no se pueden alcanzar; preguntarse sobre las cosas que se pueden lograr hoy y que ayudan a caminar en la dirección hacia la cual se quiere ir.
5. Llevar a cabo acciones decisivas. En situaciones adversas, actuar de la mejor manera que se pueda. Llevar a cabo acciones decisivas, es mejor que ignorar los problemas y las tensiones, y desear que desaparezcan.
6. Buscar oportunidades para descubrirse a sí mismo. Muchas veces como resultado de la lucha contra la adversidad, las personas pueden aprender algo nuevo sobre sí mismas; pueden sentir que han crecido a nivel personal, y que han logrado una mayor y mejor apreciación de la realidad.
7. Cultivar una visión positiva de sí mismo. Desarrollar la confianza en la capacidad para resolver problemas y confiar en las intuiciones.
8. Mantener las cosas en perspectiva. Aun cuando se enfrenten situaciones dolorosas, tratar de buscar la situación que causa tensión en un contexto más amplio, y mantener una perspectiva a largo plazo. Evitar agrandar la situación fuera de su proporción real.
9. Nunca perder la esperanza. Una visión optimista permite esperar que ocurran cosas buenas y mejores en la vida. Tratar de visualizar lo que se quiere en vez de preocuparse por lo que se teme.
10. Cuidar de sí mismo. Prestar atención a las necesidades y deseos. Cuidar de sí mismo ayuda a mantener la mente y el cuerpo listos, para enfrentarse a situaciones que requieren resiliencia.

Resilience

Is the ability of a human being to face and overcome adverse situations, to see obstacles and difficulties as opportunities, to react positively when faced with subversive circumstances, to learn from them, to overcome them and to be positively transformed.

The ability to remain standing when storms threaten and batter us; to stand does not mean being rigid, inflexible, incapable of feeling discomfort, emotional pain.. You need to be flexible and to have vision, to recognize when the time has come to let go of the moorings and to launch into a new direction. Crises are necessary for human and spiritual growth, they are opportunities for growth and allow us to discover and to develop our abilities, many of which are unknown, ignored or hidden.

"It supposes an encouraging approach to life without neglecting realism; such a person is aware of reality but does not remain trapped by it, but looks to the future, determines  viable targets and achieves them. I think the word love has more say than evil or death and the difficulty becomes a challenge, freeing us from the oppressive chains of circumstances or of so called destiny." (Rosa Ma B. )

The dynamics of resilience is very present in the Bible. It is, basically, eminently biblical, experienced as passing from evil or a lesser good to a greater good, from night to morning, from darkness to light. It is present in both the Old and New Testaments, for example: in the history of the Jewish people in the crossing of the Red Sea and the desert; in the infiltration and exile; in the miracles of Jesus sometimes difficult to interpret, and in many other individual stories. All these moments and circumstances have this dynamic of their being “something more to life”.

Pillars of resilience

Ignacio Martín Morales points out and described the following:

1. Positive self-esteem is the base of the pillars, it is the ability to love yourself and to love others, of knowing you are of great worth and also to affirm it.
2. Introspection is the art and the ability to ask yourself about your actions, moods or awareness and to give an honest answer.
3. Independence is learning to set boundaries between yourself and the adverse environment, learning to keep emotional and physical distance without falling into isolation.
4. Relationship is the ability to relate, to establish bonds and intimacy with others and to balance one's need for affection with an attitude of giving to others.
5. Initiative is the capacity and enjoyment to make demands on oneself and to put oneself to the test in very demanding tasks, taking responsibility and exercising control over difficult and conflicting situations.
6. Sense of humour is the ability to find what is humorous in adversity itself, this allows us to put negative feelings away from the source of tension, playing down the problems
7. Creativity is the ability to create order, beauty and purpose out of chaos and disorder. The result of reflection.
8. Critical thinking is the ability to critically analyse the causes and responsibilities of adversity and to take appropriate measures to address them or to change them, taking responsibility for one's own actions.

Characteristics of resilient people (Ana Muñoz)

Resilient people have three main characteristics: they know how to accept reality as it is; they have a deep conviction that life has meaning and they have an unwavering ability to improve.

Furthermore, they have some skills:

• They are able to identify precisely the causes of the problems to prevent their recurrence in the future. They know how to recontextualize events and maintain a hopeful vision.
• They know how to control their emotions when faced with adversity and can remain focused and unified even in crisis situations
• They know how to control their impulses and behaviour in highly stressed situations. They avoid seeing a crisis as an insurmountable problem.
• They have a realistic optimism, i.e. they think that things can be better, they have a positive view of the future and they believe they can control the course of their lives, but unencumbered by unreality or fantasy.
• They are considered competent and have confidence in their own abilities. They nourish a positive view of themselves.
• They are empathic i.e. they have a good ability to read the emotions of others and connect with them.
• They are able to search for new opportunities, challenges and relationships to discover themselves.

How to be people who generate resilience?

The American Psychological Association presents 10 ways to build Resilience:

1. Establish relationships. It is important to establish good relationships with significant people in life, accepting help and support from people who love us and listen to us.
2. Avoid seeing crises as insurmountable obstacles. You cannot prevent the occurrence of situations that cause a lot of tension but you can change how you interpret and react to them. You have to look further and have a positive outlook.
3. Accept that change is part of life. It is possible that as a result of an adverse situation it is not possible to reach certain goals. Accepting circumstances that cannot be changed can help you focus on circumstances that you can alter.
4. Moving toward goals. Develop some realistic goals instead of focusing on tasks that are unreachable; ask yourself about the things you can accomplish today and that helps you to walk in the direction that you want to go.
5. Take decisive actions. In adverse situations act in the best way you can. Take decisive actions, is better than ignoring the problems and stresses and wishing they would disappear.
6. Seek out opportunities to discover yourself. Many times as a result of the struggle against adversity people can learn something new about themselves, they may feel they have grown personally and have achieved a greater and better appreciation of reality.
7. Cultivate a positive view of yourself. Develop confidence in the ability to solve problems and to trust intuitions.
8. Keep things in perspective. Even when facing painful situations try to look for the cause of the tension in a broader context and keep a longer lasting perspective. Avoid making the situation out of proportion.
9. Never lose hope. An optimistic view gives hope that good and better things can happen. Try to visualize what you want instead of worrying about what you fear.
10. Take care of yourself. Pay attention to needs and desires. Taking care of yourself helps keep the mind and body ready to deal with situations that require resilience.

Celebrando Navidad y año nuevo 

en la Casa del Emigrante "El Samaritano"

English translation below

La casa del emigrante “El samaritano”, es un proyecto atendido por las hermanas de los SAGRADOS CORAZONES de la comunidad de México. Su misión es brindar atención humanitaria a la gente que emigra de Centro América para los Estados Unidos y que pasa por la ruta del estado de  Hidalgo, México, usando trenes de carga.

La casa atiende de martes a domingo de 9:00–15:00 ofreciendo a los y las emigrantes el desayuno y la comida, así como el espacio para descanso, aseo personal, utensilios, donación de ropa y atención médica básica. Eventualmente atendemos en el área de Derechos Humanos de las personas emigrantes

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Como comunidad nos propusimos celebrar la navidad con nuestros hermanos emigrantes que a diario les atendemos y prestamos servicio en su necesidades básicas. Sin duda los preparativos fueron con cada detalle, pensando en ellas, ellos y nosotras; cómo decorar con arreglos navideños la casa, las luces, el nacimiento etc.

Celebramos la Eucaristía de la navidad en la casa del emigrante “El samaritano”. Presidio el P. Raúl Serrano, de la Diócesis de Tula (Hidalgo) a la que pertenecemos. Participamos la comunidad de hermanas, los agentes de pastoral y 10 personas emigrantes que se quedaron esa noche en el albergue.  Dentro de la celebración, como es costumbre en nuestra Congregación de los Sagrados Corazones, cada año en navidad, en presencia de nuestros hermanos emigrantes y agentes de pastoral, renovamos nuestros votos comprometiéndonos a ser fieles a nuestra vocación en nuestra vida diaria. Sin duda fue el momento más emocionante para cada una de las hermanas, entre cantos de alegría de villancicos alabando la presencia del niño Dios en medio de nosotras.

Después pasamos a compartir la cena de navidad, para la que preparamos una pierna de cerdo bien sazonada y sabrosa. Nos sentamos todos a compartir en una sola mesa, como una sola familia, emigrantes, agentes de pastoral y nosotras las hermanas anfitrionas, con el motivo de  celebrar el nacimiento de Jesús que nos trae su bendición de  la paz, comunión  ante las injusticias  y abusos inhumanos. Fue un  momento  para manifestar la presencia de Dios en medio de la humanidad, en medio de nosotras, que es posible compartir la vida sin diferencias,  de vernos hermanos, hermanas, peregrinos, peregrinas en esta vida terrenal, donde todos estamos de paso.

El inicio de año nuevo 2014  también fue una celebración similar, con la diferencia de que no hubo ningún emigrante ya que esos días son feriados y hay poca movilidad para desplazarse. Sin embargo celebramos con más familiaridad porque nuestra atención giraba a lo interno a nuestro servicio, confianza en Dios y en su providencia, a los sueños y proyectos que queremos ofrecer a nuestros hermanos y hermanas emigrantes, agentes de pastoral,  voluntarios, así como iglesia y vida religiosa, fue un regalo para nosotras.

Enlace a la página de Facebook de la Casa del Emigrante "El Samaritano"

https://www.facebook.com/AyudaALosMigrantes

Enlace a la noticia del premio de Derechos Humanos:

http://www.ssccpicpus.com/en/news/medal-of-merit-in-the-promotion-and-protection-of-human-rights--to-the-migrants-house--the-samarita

http://www.ssccpicpus.com/es/noticias/medalla--al-merito-en-la-promocion-y-defensa-de-los-derechos-humanos--a-la-casa-del-migrante-el-sam

http://www.ssccpicpus.com/fr/nouvelles/medaille-du-merite-pour-la-promotion-et-la-defense-des-droits-de-lhomme-a-la-maison-du-migrant--el-

Celebrating Christmas and the New Year in The Samaritan House of Migrants,

The house for migrants, “The Samaritan”, is a project served by the Sisters of the Sacred Hearts of the community in Mexico.  Their mission is to offer humanitarian aid to the people who emigrate from Central America to the United States, and who pass on the way through Hidalgo, Mexico, traveling on freight trains.

The house is open from Tuesday to Sunday, 9:00 – 3:00, offering migrants breakfast and lunch, a place to rest, personal hygiene, utensils (tools), donated clothing and basic medical care.  Ultimately we are serving in the area of Human Rights of immigrants.

Our community decided to celebrate Christmas with our brother and sister migrants whom we care for daily, providing the basic necessities.  Without doubt the preparations were made in every detail, thinking about the women, men, and ourselves; how to decorate the house with Christmas arrangements, lights, Nativity scene, etc.

We celebrated the Christmas Eucharist in the house of migrants “The Samaritan”.  The presider was Fr. Raul Serrano, of the Diocese of Tula (Hidalgo) to which we belong.  Participating were the community of Sisters, pastoral workers, and 10 migrant persons who were staying the night at the hostel.  In the celebration, as is the custom in our Congregation of the Sacred Hearts each year at Christmas, we renewed our vows in the presence of our brother/sister migrants and pastoral workers, pledging to be faithful to our vocation in our daily life.  Undoubtedly it was the moment most thrilling for each one of the Sisters, amid joyful Christmas carols praising the presence of the God-child among us.

Afterward, we went to share the Christmas meal, for which we prepared a leg of pork well-seasoned and tasty.  We all sat down at a single table, as one family; migrants, pastoral workers and we host Sisters, with the theme of celebrating the birth of Jesus who brings us His blessing of peace and communion, opposing the injustices and abuses of persons.  It was a time for witnessing the presence of God in the midst of humanity, in our midst, where it is possible to share life without distinctions, seeing one another as brothers, sisters, pilgrims in this earthly life, where we are all just passing through.

At the beginning of the New Year 2014 there was also a similar celebration; with the difference that there were no migrants because these days were holidays and there is little transportation for displaced persons.  However we celebrated with more intimacy because our attention turned to the inner core of our service:  confidence in God and in His providence, the dreams and projects that we want to offer our brother and sister migrants, the pastoral workers and volunteers, as well as the Church and religious life.  It was a gift to us.

https://www.facebook.com/AyudaALosMigrantes

Link to the news of a prize in Human Rights:

http://www.ssccpicpus.com/en/news/medal-of-merit-in-the-promotion-and-protection-of-human-rights--to-the-migrants-house--the-samarita

http://www.ssccpicpus.com/es/noticias/medalla--al-merito-en-la-promocion-y-defensa-de-los-derechos-humanos--a-la-casa-del-migrante-el-sam

Entrevista a un novicio y a un prenovicio de México

Se trata de Manuel Pérez, prenovicio, originario del estado de Guerrero y de Edgar Bárcenas, originario del estado de Hidalgo, próximo a profesar en la Congregación el próximo 21 de febrero 2014, en su pueblo de origen I. Zaragoza.

Manuel, sabemos que estás en la etapa del postulantado de la Congregación en nuestra provincia de México. ¿Cuál ha sido tu vivencia religiosa en este tiempo?

   Ha sido de una gran apertura, especialmente en esta etapa de conocimiento de la Congregación, me he sentido muy bien en esta etapa, en la vivencia comunitaria y en la comunidad de estudios filosóficos. Han sido vivencias de relacionarme con la gente de distinta manera; se siente su cariño y aceptación siempre; he aprendido que la escucha es muy importante en esta etapa.

   Algunos hermanos sabemos que te gusta la música. ¿Qué otra actividad desarrollas o prácticas?

   Principalmente, la música ¡me encanta! Todo lo que tiene que ver con  la armonía musical, es una gran alegría, me gusta componer y ensayar, es una actividad que me satisface y la comparto con los demás. Me interesa aprender más en este rubro. Otra actividad que me llama la atención es la misión o visita a las familias. En la experiencia de misión en Chiapas me sentí muy a gusto, recuerdo la comunidad de Morelos, de la cual tengo una gran alegría, en la misión -al principio como un extraño- he  experimentado la vivencia de la fraternidad y del sentido de familia, eso ha sido muy importante para mí en mi actitud vocacional y misionera.

    ¿Si quisieras compartir algo con los jóvenes y la gente en general sobre la experiencia de ser postulante de los Sagrados Corazones, qué palabra compartirías?

   La verdad que es una gran etapa de mi vida, llena de alegría y escucha de la Palabra de Dios, un momento en que la experiencia se fortalece con el trabajo en común, la vida fraterna y la oración, me gustaría compartir que aquí en la congregación se siente uno querido y animado, respetado y escuchado, me anima mucho pasar a la próxima etapa y siento que Dios me llama a servir en la alegría de encontrarnos con Jesús.

                  

           Manuel y Edgar

                                                     

   Ahora unas preguntas a Edgar.

Edgar, regresas del noviciado interprovincial de América Latina y próximo a profesar ¿cómo te has sentido durante este lapso de preparación a tus votos y de estar de nuevo en México?

  Me he sentido muy bien, agradecido a Dios por este año que fue de noviciado, de escucha y búsqueda de Dios intensa en compañía de otros hermanos de la Congregación; una experiencia que ha marcado mi vida, estoy alegre por profesar y de encontrarme junto con la comunidad, familia y la Iglesia de Jesús. Aquí en México me he sentido muy bien, en asamblea con los hermanos y en la vivencia fraterna de cada día.

   ¿Cuál tipo de arte te gusta o te dedicas parte de tu tiempo?

   Francamente la música me gusta pero no es mi fuerte. Muy poco o casi nulo ensayo con la guitarra, más bien, me gusta mucho la escultura en arcilla o el tallado; creo que ese es un trabajo que me crea pasión y me gustaría seguir profundizando. Me gusta la lectura pero no el arte de la escritura; aprecio todo eso pero me mantengo al margen y pienso que lo mío es el trabajo con algunos materiales como compartía en un principio.

   ¿Cuál ha sido tu vivencia de misión durante este tiempo?

   He aprendido que siempre hay que estar disponible a aprender más que a enseñar, a recibir y compartir y desde la vida religiosa a estar de parte de la opción preferencial por los pobres, ya que ellos son los que me evangelizan y me hermanan en las situaciones, que a veces nos llevan al límite y no nos dejan salir por el miedo que a veces nos invade. La vivencia más marcante de esta opción fue en la parroquia de Chiapas y sus comunidades, que nos reciben con alegría cuando les visitamos y que nos dejan con una enseñanza humana, social y espiritual muy fuerte.

       Si quisieras compartir algo con los jóvenes y la gente en general sobre la experiencia de ser religioso de los Sagrados Corazones, ¿qué palabra compartirías?

   Yo les diría lo que Jesús me hace sentir en su llamado: “Ven y sígueme”. Que vale la pena arriesgarse y que es una gran aventura alegre seguir a Jesucristo  al estilo de un hermano de los Sagrados Corazones, que no hay que tener miedo, que llevamos su evangelio por todas partes para compartirlo y enriquecerlo; que esta misión realmente nos urge y nos motiva a salir de nuestro egoísmo y nos libra de nuestras ataduras, que en la pobreza evangélica como religiosos aprendemos la virtud de la caridad. ¡Ánimo y sigan a Jesús!

ENCUENTRO EN TORNO A LOS VOTOS PERPETUOS, COLOMBIA (III)

Viernes 27 de diciembre

Comenzamos la tercera semana de esta encuentro, encaminamos la recta final. Por otro lado hemos evaluado la segunda semana, primero de manera individual y luego en las distintas comunidades.  Esta semana el tema que vamos a desarrollar es el “compromiso para siempre en la Congregación”.

Para ello ha venido a ayudarnos y a darnos unas pistas de trabajo Carlos Briceño, teólogo y psicólogo, profesor de la Javeriana de Bogotá.  La primera pregunta que nos lanzo fue ¿por qué están aquí? para desde ahí ir dando las claves psicológicas para entender lo que significa el “para siempre”.  Nos ha hecho ver cómo para responder a esa pregunta hay que articular en toda vida tres cosas: el proyecto de vida, el sentido vital y la conciencia. Si estas tres no están en sintonía no hay un verdadero compromiso, y no es posible dar un “para siempre”.

Nos ha hecho comprender como para poder dar un “para siempre”, el hombre ha de saberse un ser biológico, psicológico, social y trascendente. Y que ha de poner en juego todas estas piezas y no solo una de ellas, porque el “para siempre” hay que darlo con todo el ser, y no solamente con una parte.

Terminamos la jornada con varios juegos preparados por el equipo de “recreación”, que nos ayudaron a conocernos un poco más y a pasar un buen rato.

Sábado 28 de diciembre

En los próximos tres días vamos a abordar los consejos evangélicos, qué significan, cómo los vivimos, y a qué nos llevan. Hoy hemos comenzado con el voto de la castidad.

Guiados por una pauta que se presentó al inicio, cada uno hemos tenido un tiempo de reflexión personal. Tras esto lo hemos compartido cada uno con su comunidad. Ha sido un compartir rico, que luego se ha vuelto a abordar en el plenario con todos los hermanos participantes.

Del compartir se podría destacar la importancia de vivir una sana castidad. Para ello la importancia de vivirlo en comunidad, junto a los hermanos, que te acompañan y te guían en el mismo proceso, ya que están viviendo, o han vivido, la misma situación. Ante las dificultades la importancia de compartirlo a tiempo, para dejarse acompañar.

Algunos se quejaban de que no hubiese parte práctica en este día, que solo se haya abordado de manera teórica.

Domingo 29 de diciembre

Hoy el voto que nos tocaba abordar fue el de la pobreza. Tuvimos un primer momento de trabajo personal para analizar lo que nos ayudaba y dificultaba a vivir este voto, a nivel personal, social y de vida religiosa. Luego Enrique nos compartió su vivencia personal del mismo, abarcando desde su familia, y su experiencia en la Congregación. Tras esto volvimos a tener un rato de reflexión personal a la luz de las Constituciones.

Después de la comida, en lugar de jugar al futbol, como es tradicional en este encuentro, se jugó un partido de voleibol, donde el equipo de los padres sufrieron todo el partido, pero acabaron obteniendo la victoria.

Tras una buena ducha, o piscina, retomamos el compartir en comunidades. Y luego, tras la merienda, compartimos lo expuesto en el plenario.

Del compartir destacamos que estamos llamados a la pobreza, pero sabiendo que nuestro ser pobres nunca será a la manera de los pobres. Por suerte, o por desgracia, nunca nos faltará un plato en la mesa o un techo donde cobijarnos. Nuestro ser pobres es sabernos llamados a ser austeros y humildes, a ser solidarios con los pobres, y a que ellos sean la opción preferencial de nuestra vida. Sabiendo que nuestra opción preferencial por los pobres no es excluyente y que tenemos que estar atentos a todas las realidades de pobreza (en sentido amplio) que requieran nuestra atención. No podemos caer en el reduccionismo de reducir el voto de pobreza solo a lo material o los bienes, el voto de pobreza a de llevarnos a desprendernos de todo, y a no ser de dueños de nada, ni de nuestro tiempo, ni de nuestra vida, para así poder entregarnos libremente y absolutamente a los demás.

Terminamos el día viendo la película “Intocable” o “Amigos”, según la traducción que se haya hecho de la película en cada país.

Lunes 30 de diciembre

Comenzamos en la capilla y tras el desayuno cogimos la fuerza necesaria para abordar el tercer y último voto: la obediencia. La dinámica fue similar a la de los otros días, la mañana fue dedicada a la exposición del voto por parte de Arley y posteriormente al trabajo personal. La tarde fue dedicada al compartir en las comunidades y en el plenario.

De la reflexión podríamos destacar que aunque le pueda parece extraño a la gente, el voto de obediencia es el que más  nos cuesta, ya que toca la libertad de cada uno. La obediencia es la que nos hace salir de nosotros mismos, y saber que no somos dueños de nuestra vida, sino que es Dios, a través de la Congregación, quien nos guía. Para poder vivir bien este voto es esencial una actitud de escucha y de fe para poder elaborar un correcto discernimiento para poder saber lo que Dios quiere de nosotros. No podemos caer en la tentación de pensar que lo que diga la mayoría es lo correcto o la voluntad de Dios, siempre hemos de estar atentos para poder escuchar su voz.

Para concluir estos tres días en torno a los votos, en la Eucaristía nos invitaron a presentar cada uno un signo de lo que había supuesto la vivencia de los votos.

Terminamos el día viendo la película “Infiltrados”.

Martes 31 de diciembre

El último día del año estuvo dedicado al proyecto de vida. Ya desde la mañana en la oración se nos invita a tener esto presente. Tras una presentación de Arley sobre el trabajo a realizar,  dedicamos la mañana a reflexionar de manera personal sobre todo lo abordado en el encuentro para luego concretarlo en un proyecto de vida. El objetivo era que lo trabajado en el encuentro no quedase sólo en el recuerdo, sino que también quedase recogido como proyecto con unos objeticos concretos para los próximos años, teniendo como horizonte los votos perpetuos. Por lo tarde compartimos en comunidad lo reflexionado y elaborado en la mañana.

Tras la merienda comenzó el tiempo libre para que cada uno se preparase como estimase conveniente para el año viejo. La último noche del año la pasamos, primero con una cena escasa, y luego tras las campanadas, cantando y riendo. Previo a las campanadas se organizó un concurso con distintas pruebas donde se mostraron los distintos talentos de cada uno. Cabe destacar que fue el equipo de los formadores el que quedó en último lugar.

Miércoles 1 de enero

El primer día del año lo dedicamos a descansar. Tras varias semanas de mucho trabajo los formadores se apiadaron del pueblo de Dios y decidieron darnos un día de descanso. Cada uno libremente decidió como ocupar su tiempo. Por lo mañana varios hermanos fueron al cercano pueblo de Fusagasugá, otros prefirieron descansar y otros pasear. Por la tarde mientras unos descansaban otros hermanos se fueron a un cercano centro recreacional para jugar al fútbol y a otros deportes colombianos.

Por la tarde comenzamos el retiro predicado por nuestro acompañante espiritual Martín, quien nos invitaba a adentrarnos en nuestro interior para profundizar en los frutos espirituales de este encuentro. Comenzamos así con un silencio mayor que duró hasta la tarde del día siguiente.

Jueves 2 de enero

Seguimos con el retiro comenzado el día anterior. Por la mañana se nos invitaba a adentrarnos en la experiencia de Dios en la vida según los consejos evangélicos, para ello fuimos ayudados en nuestra oración con textos de varios místicos, entre ellos San Juan de la Cruz.

Por la tarde la meditación estuvo orientada a dar las pautas para vivir una nueva ascética. La ascesis es un trabajo nuestro ante Dios, no implica remplazar la gracia, ni tampoco indica que por esfuerzo humano se acceda a la salvación, sino que es una dinámica espiritual parangonable con la disciplina de los atletas quienes hacen renuncias específicas para alcanzar una medalla, pero su mejor galardón consiste en entregar lo mejor de su condición en la competencia. De igual modo cada creyente ha de realizar diversos esfuerzos para sacar lo mejor de sí de cara a la búsqueda de Dios. Se presentan algunas claves para el trabajo ascético: la desintoxicación, es decir, romper con las inercias que nos llevan; situarse en la paz y caminar en el bien.

Terminamos el día de retiro en la Eucaristía haciendo memoria de san Basilio Magno y san Gregorio Nacienceno.

  

Viernes 3 de Enero

            Iniciamos el día con una oración en la mañana. En la primera sesión de la mañana se hizo una evaluación a través de una pauta presentada por Raúl Pariamachi, cada uno de los participantes valoró por escrito lo vivido. Enseguida se hizo una evaluación en plenario de todo el encuentro. Hubo dos visiones; en general para la mayoría de los hermanos fue una experiencia muy significativa que generó cuestionamientos y desafíos importantes. Se rescató la calidad de la casa, la atención y comida variada. Junto a esto se considera que la experiencia de las pequeñas comunidades fue un espacio de conocimiento y cercanía que favoreció, en la mayoría el compartir la vivencia de los votos y los sueños de los participantes. También se valoró positivamente el hecho de participar en la celebración de la Navidad en las comunidades de las Parroquias Antonio de Padua (Planadas, el Porvenir y el Diamante), San Damián y Santa María de la Luz.

También se presentaron tensiones y discrepancias por la forma de vivir la liturgia. Al final se constató que no fue posible lograr una cohesión total del grupo.

In utroque usu

Richard McNally sscc 
Member of the US Province,  at Wahiawa community (Hawaii)

                                                                                                         English

Twice while I lived in Rome I made my yearly retreat at the Benedictine Monastery in Norcia, the birthplace of Saints Benedict and Scholastica. Norcia is a fairly young and vibrant community that has the special characteristic of celebrating the liturgy “in utroque usu”, that is in both forms of the Roman Rite, the ordinary and the extraordinary. My two weeks there were the longest exposure I had had to the older form of the liturgy since I was in secondary school and the reforms of the Council and post-Council began to take effect.

After returning to the USA, I was assigned as pastor here in Our Lady of Sorrows, Wahiawa. On arriving last January I found a parish that is very alive. One aspect of that life is the sacred liturgy. Many people are involved in various ministries and that participation is more authentic because there is good understanding of the Church’s liturgy. We have six choirs and a good corps of lectors, special ministers of communion and servers. There is a funeral planner and a small group that accompanies the family through the funeral rite. There are two women and a man who are trained as ministers of ceremony for major celebrations. All of it is coordinated by a man and a woman who share a part time paid position as liturgy coordinators.

Being quite happy and busy enough here at OLS, I was surprised when our Bishop asked me to help on occasion with the celebration of the Extraordinary Form at a parish in Honolulu. Having never celebrated according to the Missal of 1962 it meant watching an instructional DVD a good number of times. After that I had lessons with Fr. Steve Nguyen, the diocesan priest, who is pastor with responsibility for the Latin Mass community. Finally in September I celebrated the Mass for the first time. Now I do so once a month.

In a letter to bishops accompanying his Motu Proprio, Summorum Pontificum,  Pope Benedict said, “the two Forms of the usage of the Roman Rite can be mutually enriching…” There is quite a bit I could say about that even from my short experience. I will limit myself to two examples. The Extraordinary Form reminds me that the Mass has meaning before anything I do. The liturgy is bigger than me. It precedes me. Whenever I celebrate, whatever the form, I am a minister of the Church called to be faithful to the meaning given by Jesus and continued in the Church’s tradition. The Ordinary Form reinforces the sense that I am not the only celebrant. I am one with the whole worshiping community as together we turn to the Lord and worship the Father “through Him, with Him and in Him.”

When I celebrate the Eucharist here at Our Lady of Sorrows, I minister to a community that really desires to be connected to the Lord and the work of his Gospel. This is a very easy place to celebrate because I see the life of the body overflowing the liturgy. A happy discovery celebrating the traditional liturgy has been the discovery of another community, many younger professional folks with lots of children, who are very invested in their faith and committed to sharing that faith. There are a lot of “existential peripheries.”

Let me quote the website of the monks of Norcia.  “This practice of offering both forms (in utroque usu) allows us the possibility to drink deeply from the riches of the tradition and, at the same time, to open our doors wide to the Church as she is today.” I would say, “Amen.”